Chaves, el fascinado
¿Verdaderamente sería democrática una derecha que tuviera por modelo a Franco y proclamase su fascinación por Hitler? Rotudamente, no. En cambio, sí tenemos a una izquierda que es indulgente con el terrorismo palestino y con ese caduco comunismo, tan sangriento como el anterior, que tiene a Castro como principal modelo. No importan sus miles de presos políticos y sus cientos de miles de asesinatos en sus décadas de tiranía.
¿De qué se entusiasma Manuel Chaves?, ¿por qué esa «fascinación»? Será por el asesino en masa que más años lleva atropellando la vida y la libertad de los cubanos. La complicidad de la izquierda en este asunto es asombrosamente inmoral, han perdido el norte. Asumir el asesinato permanente de la vida, la hacienda y la libertad de millones de cubanos dice todo de un político.
Y, por último, la guinda: la cobardía y la vileza de atarcar en esas circunstancias al partido de la oposición en España, es decir, a los españoles, a los andaluces, que lo combaten. Es un honor para el partido popular que preside Mariano Rajoy. Es una demostración de cómo la Izquierda, siempre encantada de haberse conocido, puede estar en un sitio pisando sangre, sonriendo y con «buen talante». Ese sitio es Cuba. Si le fascina tanto el tirano caribeño, ¿por qué Chaves, con la buena pensión que va a percibir, no se instala en Cuba?
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