El cisma vecinal

El presidente de la asociación de vecinos de El Carmelo, Fernando González, tiene todas las papeletas para convertirse en la primera víctima de la crisis. Un grupo de desalojados le acusa de ser demasiado «tibio» a la hora de defender las reivindicaciones de los afectados, la mayoría de los cuales rechaza ahora a la asociación de vecinos de El Carmelo como su interlocutor válido ante la Generalitat y el Ayuntamiento de Barcelona. Sus detractores le acusan de ser un satélite del PSC para controlar a los afectados más radicales del barrio. El cisma vecinal se forjó el pasado sábado en una reunión, en la que un grupo de personas celebró una asamblea paralela donde, al parecer, se fraguó la nueva Asociación de Afectados de la Línea 5 de El Carmelo, que agrupa a unos 200 desalojados.

A estos dos «bloques» se suman los trabajos de asesoramiento legal y técnico que ofrece el Colectivo Ronda, así como los que prestan otros gabinetes de abogados de Barcelona.